Por Avelino Zurro.
El entrenador es parte de una familia con historia en el boxeo argentino. Es la tercera generación de Técnicos. Trabaja en la escuela 'Santos Zacarías' en la calle Rafael Calzada nº 2091 de la ciudad del mismo nombre en el partido de Almirante Brown. El coordinador es Alberto Zacarías, con quien trabaja a la par, y los acompaña el profe Andrés Picasso desde hace varios años. A continuación, las respuestas de Patricio Zacarías, sus valores e ideología y su visión sobre el boxeo argentino.
¿Cómo llegaste a ser entrenador?
Desde muy chico tuve la suerte de estar en un gimnasio. A los 4 o 5 años me llevaban al gimnasio de la Federación Argentina de Box (FAB). Mi papá (Alberto) trabajaba junto a mi abuelo (Santos). Andaba por todos lados, si mi viejo tenia que hablar con el presidente, creo que en ese momento era González, me llevaba a la oficina y me hacían una chocolatada.
Desde los 14 trabajé en los festivales, acomodaba las sillas, vendía entradas, hice de todo. A eso de los 19 ya quedé al frente de la organización de los eventos. Cuando tuve 21 o 22 pasé a dar las clases junto a mi viejo por distintos clubes, pasamos por Mataderos, después estuvimos en All Boys, no por mucho tiempo, hasta que abrimos el gimnasio 'Santos Zacarías' en Rafael Calzada. Desde ahí estuve a cargo del boxeo recreativo. Cuando vimos que todo funcionaba bien me aboque al boxeo competitivo que es lo que siempre me gustó.
¿Tratas de seguir sumando conocimientos para mejorarte como entrenador?
Si, siempre mirando videos y peleas. También trató de escuchar y aprender de técnicos cuando nos toca viajar a otras provincias o llevamos chicos a guantear a otros gimnasios. Me pasa en el Almagro Boxing Club con el profe Albelo, con Diego Hidalgo, Gustavo Saucedo, Pablo Rodríguez, el Maestro Puente, no me quiero olvidar de nadie. Tuve la suerte de escuchar charlas en el vestuario del gimnasio de la FAB, donde estaban: Julio García, Alberto 'Coca' Andrada y Mario Tedesco. De esa manera buscó perfeccionarme. Además, soy profesor de Educación Física y Técnico recibido en la Federación.
¿Tenés tu manual para los entrenamientos y lo respetas a rajatabla o podés optar por otras formulas si la ocasión o el boxeador así lo requieren?
A todos los que entran al gimnasio les enseñamos de la misma manera. Estamos desde las 8:30 hasta las 21. Tenemos recreativos, amateurs y profesionales de todas las edades y a todos les enseñamos la técnica del boxeo, que es una sola y ya esta todo inventado. La posición de guardia, como se camina, lo general. Obviamente después a cada persona según el objetivo, la experiencia previa o sus características vamos dándole una impronta a los movimientos y a los ejercicios. Después varia según el boxeador, si le conviene que trabajemos en ataque o en defensa, si tiene la mano pesada y puede definir la pelea en un golpe. Variamos las formulas según el boxeador.
¿Qué 3 cosas son necesarias para que una persona que entra a tu gimnasio se transformé en boxeador?
Lo principal que tienen que tener para poder trabajar con nosotros es ser buena persona. Después, muchas ganas de boxear y armarse de paciencia. Tiene que saber que esto lleva mucho tiempo, hay que trabajar y hacer caso.
¿Qué tipo de boxeador te gusta entrenar: noqueador, estilista o estratega?
Me gustan entrenar todos los tipos de boxeadores. Obviamente que hay que respetarle las características de cada uno. Al noqueador es un error querer transformarlo en estilista o estratega. Partiendo de la virtud que tiene se le trata de agregar otras características. Lo mismo para los otros tipos de boxeadores. Si pudiera elegir uno, te digo los noqueadores. Se le pueden llegar a sumar las otras condiciones. Hoy en día lo que gusta son los noqueadores.
¿Qué características le imprimís a tus boxeadores y es tu marca registrada?
Creo que la característica que tienen los chicos de la Escuela es que, desde siempre, salen a ganar donde sea y se van a brindar al máximo siempre.
¿Qué boxeador argentino de cualquier época te hubiese gustado entrenar?
Es algo muy amplio. Pero por lo que lo conocí por persona y lo que siempre me cuenta mi viejo, elijó a Alberto Sicurella. Por sus ganas de entrenar siempre, no faltaba nunca al gimnasio, no tenia problemas para dar el peso, era un apasionado por el boxeo.
¿Tenés algún referente argentino o extranjero en la Dirección Técnica?
Tuve la suerte de tener a mi abuelo como referente. Lo pude vivir desde chico y lo sigo viviendo cuando voy a un festival y me cuentan cosas de él y también de mi viejo, que aprendió de mi abuelo y le agregó otras cosas más. Sobre todo, como organizar las carreras y eventos. Ellos son mis dos referentes.
¿Recurrís a You Tube u otra red social para ver entrenamientos de Técnicos como Freddie Roach o Robert García?
Sinceramente no soy mucho de las redes sociales. Miro las peleas de antes, me gustan mucho. Creo que ya está todo inventado, no hay mucho misterio. Pienso que el nivel de técnicos en Argentina es muy bueno, afuera pueden tener otras ventajas, como la organización o los guanteos que pueden armar. Pero para mí los técnicos argentinos trabajan muy bien. Los que me nombraste en la pregunta tampoco van a brindar sus formulas o secretos en las redes sociales. Esa gente no suele mostrar mucho.
¿Hay que trabajar el aspecto educativo en los boxeadores jóvenes?
Sin dudas, siempre les explicamos a los chicos cómo es este deporte. El boxeo es una carrera muy corta que con suerte podés boxear hasta los 33 o 34 años, si es que te va medianamente bien. Después la vida sigue y tenés mucho tiempo por delante. Podes ser cualquier cosa, medico, abogado, presidente de la nación, lo que quieras, entonces tenés que prepararte académicamente y nosotros los ayudamos y en algunos casos hasta en la educación personal.
¿Los boxeadores pueden estudiar o trabajar a la par de su vida deportiva?
Como poder pueden y lo hacen hasta el 90 o 95 por ciento de los boxeadores sobre todo en el amateurismo y las primeras peleas como profesionales. Hay que ver que tipo de trabajo, no es lo ideal. También hay que ver los objetivos del boxeador. Todos arrancan queriendo ser campeones del mundo, pero después hay circunstancias en la vida que corren el objetivo. Hay que mantener una familia o ayudar en la casa. Ver si es una persona sola, si lo banca la familia. No es lo ideal, sobre todo en profesionales que deberían dedicarse de lleno
Sí tenés un boxeador amateur que al inicio de su carrera acumula solo derrotas y empates ¿El entrenador tiene que tomar una decisión sobre la continuidad de la carrera del boxeador o lo tiene que alentar para que mejore y siga?
Hay que tener en cuenta los golpes que recibe y de como asimila el castigo. A veces el resultado no es el único indicador. Te puedo dar casos de boxeadores que sus récords marcan igual cantidad de derrotas que triunfos, pero porque han tenido peleas difíciles y no esquivaron a nadie. Después fueron grandes boxeadores como profesionales. El amateurismo es una etapa de formación. No es en si por los resultados. Sí yo tengo un boxeador que ganó diez peleas seguidas, pero en todas lo tocaron y fue al piso, pero se recuperó y ganó, eso tampoco es bueno y tengo que poner atención a ese que gana siempre. La función principal del entrenador es cuidar al boxeador. Que no reciba golpes y presentarlo siempre en condiciones. Pero el resultado no es solo el indicador si esta recibiendo muchos golpes. Hay que mirar siempre el desarrollo del combate.
¿Cuál es el mayor logro al que aspira un entrenador?
El mayor logro es tener un campeón del mundo. Todos los técnicos de boxeo deben soñar con eso.
¿Es una profesión redituable económicamente?
Si hablamos de boxeo competitivo, la respuesta es que no. Hoy por suerte la mayoría de los entrenadores pueden tener boxeo recreativo que te permite vivir del deporte. Obviamente, si tenés dos campeones del mundo, es redituable. Pero para eso se requiere mucho tiempo y es muy difícil el camino. Además, como esta planteado el boxeo en Argentina, no termina siendo redituable para el técnico.
Definite como entrenador.
Es difícil definirse a uno mismo. Nuestra Escuela mantiene siempre las mismas características que empezaron con Santos, siguen con Alberto y yo las continuaré: somos muy trabajadores, siempre vamos a cuidar a los chicos y a las chicas y somos muy honestos.